Somos treinta peldaños
treinta escalones solidarios
pegados a un “barandilla”
que nos tiene a dos velas
de cervezas y cenicientas
de parrandas y pacharán
andamos con el hígado exiliado
y muchos secretos sin (por) contar
Tenemos “al prenda” el sereno rockero
que perdió la llave que cierra el bar
dormimos con la puerta abierta
para todo aquel que quiera entrar
somos los más plus tal cuales imperfectos
nos comportamos sin comportamientos
y no alumbramos sin alumbrar
No hay un candado que cierre
una estación que guarda tanto aliento
ni un cerrojo que se preste
a dejar a la cultura en el andén
no hay tormenta que inunde el línea
ni un fusible que descarrile este tren